En el marco de la semana de la discapacidad, que se extenderá hasta este domingo 9 de diciembre, conversamos con María José Bagnato, Directora de PRONADIS, acerca del balance y los desafíos en torno a la discapacidad, con la accesibilidad como horizonte.

¿Cómo evalúa el desarrollo de esta semana de la discapacidad?

Podemos hacer un balance muy positivo de lo que va de la semana, no solo por las actividades que tradicionalmente se desarrollan por todo el país, sino porque particularmente este año se ha generado más movilización del sector público y de actividades que le dan más visibilidad a la temática en todos los departamentos del país.

A pesar de que la temática de la discapacidad pueda parecer invisible, la realidad es que la gente está y tiene capacidad de organizarse. Incluso se ha trabajado mucho en PRONADIS desde las propuestas generadas por las organizaciones de la sociedad civil. Este es el caso de la marcha por la accesibilidad que tuvo lugar el lunes en Montevideo, que contó con el apoyo de PRONADIS, pero también en Canelones, Maldonado y otros departamentos.

En otros casos se trató de manifestaciones a nivel público, lo cual nos parece un avance, esta serie de actividades abiertas a toda la sociedad, y no dirigidas exclusivamente a las personas con discapacidad.

También PRONADIS ha trabajado mucho en el interior con las oficinas territoriales del MIDES y apoyando iniciativas de las comisiones departamentales. Se trata de un trabajo en territorio que se llevó adelante durante todo el año y se consolidó con la celebración de esta semana.

¿Cómo se conjugan los conceptos de discapacidad y accesibilidad, en clave de derechos?

Dentro de los objetivos de PRONADIS se encuentra cambiar la imagen de la discapacidad a nivel público; cambiar la imagen de que la persona con discapacidad es un sujeto pasivo, un objeto de caridad o beneficencia e incluso de rehabilitación exclusivamente.

Se trata de cambiar una imagen que hay en la sociedad hacia lo que realmente es, una persona con derechos y posibilidades si se le da las condiciones necesarias de transformarse en un sujeto activo en su propia vida. En ese sentido el concepto de accesibilidad nos parece un concepto muy potente para mostrar esta visión de la discapacidad y a partir de ahí transformar los prejuicios a nivel social.

No creemos que podemos hacerlo solos desde PRONADIS, pero sí dar un impulso importante y promover esta visión desde la perspectiva de derechos.

El tema de la accesibilidad también lo estamos trabajando con el Instituto Nacional del Adulto Mayor. La accesibilidad universal no favorece solo a las personas con discapacidad, sino a todas aquellas personas que en algún momento de la vida requieren de entornos accesibles.

La accesibilidad va más allá de las barreras arquitectónicas, que limitan el acceso físico de las personas que tienen dificultades en este sentido, sino que alude además a las barreras comunicacionales, que limitan la capacidad de comprensión y comunicación entre personas; o cuando la información se presenta solo en forma visual, en el caso de las personas con ceguera o baja visión; y las barreras actitudinales, las más duras de romper. Las otras son barreras que implican tomar la decisión de levantarlas, pero para que esto suceda, tiene que mediar una concientización a nivel social, y es eso lo que más cuesta.