El 7 de junio se llevó a cabo, en el Paraninfo de la Universidad de la República (Udelar), el acto de apertura del II Congreso Internacional de Psicología, evento organizado por la Facultad de Psicología en coordinación con la Udelar. A cargo del evento estuvo el rector interino de la Udelar, Álvaro Mombrú; el decano de la Facultad, Enrico Irrazábal y la profesora Irene Barros, integrante del Comité Organizador del Congreso.
Este Congreso significó uno de los mayores encuentros académicos de Psicología en la región y contó con la participación de expositores de distintos países y diversas disciplinas. Durante los tres días que duró este encuentro los participantes integraron un espacio de reflexión acerca de las estrategias de gobierno de la vida y el ecosistema para abordar la ruptura global que se generó en la vida cotidiana a raíz de la pandemia por covid-19 que asoló el planeta.
En su intervención, Irene Barros se refirió a las preocupaciones que se generan en la sociedad actual, como la violencia (por orientación, sexual y género, especialmente), los derechos humanos, inequidades en el acceso a la salud, vivienda, educación, entre muchas otras. “Tenemos problemas comunes, por lo que es necesario un abordaje en común de los mismos. También tenemos diferencias y compartirlas nos sirven para enriquecernos”, sostuvo.
Por su parte, Irrazábal agradeció todos los esfuerzos realizados por distintos actores para llevar a cabo el Congreso. Posteriormente, se refirió a los hechos más recientes en cuanto a la persecución de los crímenes ocurridos en la dictadura y apuntó que estos hechos “son una muestra clara de que nada pasó, todo pasa” y que “la necesidad de construir en eventos académicos universitarios hechos de esta naturaleza son toda una interioridad universitaria y no son ajenos a la producción de conocimientos”.
El decano resaltó que este Congreso es “biopolítico” y se refirió a la pandemia por Covid-19 y los impactos de este en el funcionamiento social y de la Facultad misma. “La pandemia modificó los vínculos vitales donde transitan los procesos de aprendizaje y producción de conocimiento y los de extensión, que tienen un componente de territorialidad, el cual se cortó en este contexto”, aseveró Irrazábal.
Tras referirse a la necesidad de presupuesto para el funcionamiento de la Universidad, Irrazábal habló de otro problema que tiene Uruguay: el suicidio. “Hoy tenemos récord de suicidio y estamos entre los 20 países con más suicidios en la edad comprendida entre jóvenes y un tramo de la vejez. Es un problema que tiene lugar justamente cuando abrimos un Congreso que habla de las biopolíticas y aborda este tema”, explicó.
Por su parte, el decano de la Facultad de Química y rector interino destacó que la Facultad de Psicología “busca dialogar con la comunidad y estar a la altura de los desafíos que esta le plantea”. Asimismo, resaltó que “las instituciones educativas juegan un papel clave, porque la sociedad necesita tener referentes que puedan dar respuesta en temas de especialidad”.
Luego de la apertura, se presentó el material audiovisual “Apuntes salteños”, cuya documentalista, Alicia Cano, describió como una “pieza coral que narrar las huellas cotidianas e invisibles de la dictadura en la sociedad salteña. Tres historias que se desdoblan entre pasado y presente cruzando vivencias y generaciones”.