El fundador de Wikileaks, Julian Assange, dio a conocer un cable sobre Uruguay en el que el embajador estadounidense en 2009, Frank Baxter, aseguró que la destrucción de Uruguay y su infraestructura no representa un peligro para EEUU. "A Estados Unidos no le importa si Uruguay es borrado del mapa o es destruido", dijo.
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, aseguró tener en su poder un cable secreto de la embajada de Estados Unidos en Uruguay en el que el embajador Frank Baxter señaló que la destrucción de la infraestructura de nuestro país no representa un peligro para Estados Unidos.
El anuncio fue realizado en el marco de una teleconferencia realizada en la Facultad de Psicología en la que Assange presentó su libro Cryptopunks, desde la embajada de Ecuador en Londres donde se encuentra desde agosto de 2012.
Assange leyó un informe secreto, fechado en 2009, que habría sido entregado en Washington por el embajador estadounidense en nuestro país en el que informaba que “Uruguay no cuenta con infraestructura critica que sea vital para Estados Unidos, su incapacitación o destrucción no tendría un efecto debilitador en la seguridad, en la economía o en la salud de Estados Unidos”, dice el cable según lo leído por Assange.
“Es decir que a Estados Unidos no le importa si Uruguay es borrado del mapa o es destruido a diferencia de Irak, Uruguay está en una posición muy bonita para hacer algo”, agregó Assange.
“La gente en Uruguay puede sentirse segura apoyando a Wikileaks”, bromeó, y calificó como “irónico” el contenido del documento.
Assange agradeció a Ecuador y al presidente de ese país, Rafael Correa, por haberle dado asilo político en agosto de 2012 y resaltó el apoyo que recibió de toda la región.
"La independencia de América Latina ha avanzado mucho en estos años, era difícil imaginar que una nación de tamaño mediano de América Latina hace diez años podría haberse hecho cargo y haber hecho una movida tan correcta para defender los niveles de derechos humanos", expresó.
Assange recordó que en agosto del 2012, cuando las fuerzas británicas rodearon la embajada del país Latinoamericano en Reino Unido, "los gobiernos de América Latina se plantaron para defender mis derechos y los de Ecuador, incluyendo Uruguay".
En la parte final de la conferencia a distancia, Assange alentó la decisión del gobierno uruguayo de utilizar sofware libre en sus organizaciones y llamó a los uruguayos a colaborar con Wikileaks.
Durante la conferencia Assange habló sobre su libro Cryptopunks en el que habla de los peligros que representa Internet para la seguridad y la soberanía de los países, particularmente por la centralización de casi toda la información en soportes físicos ubicados en Estados Unidos.
“Con la penetración de Internet en todas las facetas de la sociedad, sustituyendo el sistema de correo y el telefónico y aún las reuniones entre personas, ha permitido el mayor robo de conocimiento y riqueza humana. Ha colocado básicamente en manos de Estados Unidos y sus socios la información de la comunicación de la mayor parte de la humanidad”, señaló.
Assange hizo hincapié en que las agencias de espionaje internacional, incluso las de estados que no son tan ricos están optando por registrar todas las comunicaciones, dado la baja de los costos de registro y almacenamiento.
”¿Por qué seleccionar si uno puede tenerlo todo? Se almacena, se clasifica y si se lo necesita, se lo busca”, añadió, señalando también que antes solo se realizaba espionaje sobre determinados activistas, pero ahora “no están interesados en unos pocos”.
El australiano calificó a internet como “la mayor amenaza a la civilización humana” , señalando que la Guerra Fría, representó una amenaza marginal si se lo compara con el poder que implica la apropiación de datos de Internet.
En ese sentido, señaló que muchos de los países latinoamericanos comenzaron su relacionamiento en Internet entre sí, a través de la conexión con Estados Unidos, aunque ahora estaban creando conexiones más directas.
Assange resaltó las implicancias que tiene el hecho de que la infraestructura de Internet esté en manos de Estados Unidos para la soberanía y el concepto mismo de los Estados, dado que un estado se define por su capacidad coercitiva, la de controlar las comunicaciones y la de controlar su economía.
En ese sentido, agregó que especialmente América Latina tiene el problema que para comunicarse con la mayor parte del mundo pasa por Estados Unidos y eso cuestiona sus libertades de expresión, movimiento y asociación o interacción económica.
“Los países de América Latina están cargando información en servidores de California controlados por Google, Yahoo, y servicios de Estados Unidos, legal e ilegalmente”, señaló y recordó que el Washington Post informó que EEUU intercepta 1.7 mil millones de comunicaciones por día.